Es una iglesia de planta de cruz latina, con una nave y crucero, y capillas laterales (tres en el lado de la Epístola y dos en el del Evangelio) abiertas a la nave.
Está realizada en piedra sillar, con algunos elementos añadidos en ladrillo (pórtico, linternas de iluminación de las capillas).
Su exterior reviste especial interés, debido al equilibrado juego de volúmenes de sus componentes, que se disponen escalonadamente desde el cimborrio hasta las capillas laterales, pasando por el nivel intermedio de la nave y cabecera.
La puerta, en un sencillo arco de medio punto, está precedida por un pórtico cuadrangular saliente hacia el exterior y abierto en su frente por un gran vano también en arco de medio punto. Da paso a un espacio interior a modo de atrio.
El interior, con una disposición muy equilibrada y una gran sobriedad decorativa, se ajusta a una tipología muy característica de planimetría barroca aragonesa. Una única nave (dividida en tres tramos por arcos fajones), los brazos del crucero y la cabecera se cubren con bóvedas de cañón con lunetos, que arrancan de un entablamento decorado a base de listeles y mútulos. El crucero está cubierto por una cúpula hemiesférica sobre pechinas, que al exterior se trasdosa en un cimborrio cúbico.
En el lado de la Epístola se abren tres capillas laterales, comunicadas entre sí. Las tres cuentan con embocaduras en arcos de medio punto moldurados, siendo la central (situada frente al atrio de acceso) más alta que las laterales; se trata de espacios cuadrangulares cubiertos con cúpulas semiesféricas similares a la del crucero, que en este caso son rematadas por linternas de iluminación. Entre las embocaduras de las capillas hay pilastras adosadas, con muy escaso resalte, en las que apean los fajones de la bóveda.
Las capillas del lado del Evangelio, situadas a la altura del primer y tercer tramo de la nave, presentan las mismas características que las del lado opuesto.
El coro bajo, a los pies, es un espacio cuadrangular (que constituye un cuerpo saliente al exterior) abierto hacia mediante un gran arco de medio punto.
La torre, adosada en el último tramo del lado de la Epístola, es una estructura de dos cuerpos: el inferior, que abarca toda la altura de la nave, es cuadrangular; el superior, destinado únicamente a cuerpo de campanas, es octogonal, con vanos de medio punto para campanas en paramentos alternos.