Esta fortificación fue levantada para controlar el camino de acceso al Martes por el norte, a finales del siglo XVI. En 1535 se publicó un mapa de "Aragonia et Catalonia" donde se rotularon varias poblaciones, entre ellas Martes con su puente de nueve ojos que cruza el cauce el río Aragón. Por ello se intuye que este punto defensivo se levantó para control y vigilancia del mismo.

Puede considerarse más un puesto de guardia militar que un castillo propiamente dicho. Como tal, su función sería proteger el camino de paso y el acceso a la población, dado que está situado en un a hondonada sin otra posibilidad estratégica que el control del puente.