Se encuentra en un conjunto de prados y bordas, en el que también se ubica la ermita de San Fabián, situada en el curso bajo del barranco de La Poma. El extremo inferior del prado en el que se ubica se encuentra abancalado mediante un tosco muro de mampostería en seco, de aparejo muy similar al de los muros de la borda y situado muy próximo al extremo de ésta.
Construcción muy similar en sus características a la denominada borda a de San Fabián. Como detalles individualizables deben destacarse el inusual tamaño de los grandes mampuestos situados en las esquinas, que también tienen formas algo más regulares que los del resto de los paramentos, con función de refuerzo de la construcción; y, por otro lado, el cierre de la parte superior del hastial posterior mediante hilera de tablas, que permiten el paso del aire para contribuir al secado de la hierba, estando esta parte de la construcción protegida mediante el tejadillo producido por el achaflanamiento del extremo de la cubierta.