Se trata de un complejo conjunto arquitectónico compuesto por iglesia (con el rango de basílica), capilla, patio (con galería cubierta en el lateral que mira al pueblo), casas y hospital.
El último tramo del camino de acceso consta de una escalinata que discurre bajo galería cubierta, que se abre en dirección este, hacia la población, mediante una hilera de 12 arcos de medio punto que apean en pilares cuadrados de fuste biselado. Al final de la arquería, un vano da acceso a una zona ajardinada, desde la que se concluye el ascenso. El acceso al conjunto propiamente dicho se realiza a través de una puerta cubierta, en codo, desembocando en una plaza o patio interior.
En el frente de la plaza se encuentra la fachada de la iglesia, con pórtico, un pozo rematado por el anagrama de María y una puerta adintelada que da acceso a una sala situada bajo la iglesia. Hacia el este se abre una galería, construida sobre la escalinata de acceso al conjunto; hacia la plaza se abre con seis arcos de medio punto rebajados, apoyados en columnas octogonales (en cuyos capiteles hay una serie de inscripciones en griego); hacia el exterior, se abre, a modo de mirador, mediante 17 arcos de medio punto sustentados por columnas torsas de sección octogonal. Sobre este mirador se construyeron posteriormente las casas y hospital, que comunican por un extremo con la iglesia y por el otro con la edificación situada sobre la puerta de entrada.
Precediendo a la iglesia se sitúa un pórtico de planta cuadrada que abre en arco de medio punto moldurado y decorado en su rosca con ovas, palmetas y angelotes. Se cubre con bóveda de terceletes. En sus 4 ángulos hay una columna corintia, sobre plinto decorado con temas alegóricos y heráldicos. Sobre los capiteles y el correspondiente arquitrabe, se desarrolla un friso corrido donde las guirnaldas son sujetadas por angelotes, carneros y calaveras. Encima de la cornisa, y bajo la clave de los arcos de medio punto, permanecen los pedestales de 3 estatuas destruidas en la guerra civil.
En el muro izquierdo del pórtico se abre la entrada a la capilla de San Juan de Letrán. Es un vano adintelado, con friso sostenido por 2 zapatas decoradas con acantos y rematado por frontón liso. Tiene planta rectangular, cubierta por bóveda estrellada.
Frente a ella se sitúa la portada de la iglesia. Es en arco de medio punto abundantemente decorado en sus jambas y rosca con motivos renacentistas (ovas, candelieris, querubines), similares a los del friso y cornisa. En las enjutas, dos medallones de carácter heráldico.
La iglesia se levanta sobre un piso inferior a modo de cripta, aunque sin acceso desde el interior. Consta de una nave, dividida en dos tramos cubiertos con bóveda de crucería, y cabecera recta, cubierta con bóveda hexagonal a la que se pasa mediante bovedillas a modo de trompas. Sobre ella se levanta la torre, de planta poligonal, culminada en chapitel.