La iglesia parroquial de la Purificación de Nuestra Señora es un edificio de origen románico de finales del siglo XII que fue reformado y ampliado con añadidos de capillas, coro alto, sacristía y cuerpos superiores de la torre en épocas posteriores.
El templo está construido en piedra sillar y en el siglo XVII fue ampliado en altura y en planta, momento en que sus muros fueron recrecidos en ladrillo en la parte de la fachada donde se sitúa la portada y en todo el perímetro superior donde se dispuso la galería de arquillos de estilo aragonés. La iglesia termina en ábside semicircular de grandes proporciones orientado al este, realizado en piedra sillar con abundantes marcas de cantero y elevado en ladrillo a partir de la primitiva cornisa que se dispone sobre canecillos lisos. En la parte central de la cabecera se abre una ventana en arco de medio punto dovelada abocinada.
La fachada es un sencillo muro de ladrillo levantado sobre zócalo de piedra sillar y rematado por galería de arquillos. En la parte baja está la portada flanqueada por dos óculos elípticos, construida en piedra y muy deteriorada, que posee arco de medio punto enmarcado entre pilastras que sostienen una estructura arquitrabada a modo de entablamento clásico sobre la que se encuentra un frontón partido curvado con pináculos a los lados.
En origen el templo era un edificio de nave única al que se le fueron añadiendo capillas laterales a partir del siglo XVII para convertirse en una iglesia de tres naves separadas por pilares. En los muros de la Epístola y del Evangelio se abrieron arcos de medio punto para comunicar la nave central original con las laterales añadidas.
La nave central está cubierta mediante bóveda de cañón apuntado y consta de cuatro tramos delimitados por tres arcos fajones que arrancan de la primitiva imposta biselada románica conservada en algunos tramos. La cabecera está acabada en ábside semicircular cubierto por bóveda de cuarto de esfera y las paredes de piedra no son visibles porque en la actualidad están recubiertas por un rodapiés elevado hasta la imposta. En el altar mayor se dispone un templete sustentado por cuatro columnas donde se sitúa la imagen de la Virgen.
Las seis capillas, tres en cada lado, conservan decoraciones escultóricas y pictóricas datadas entre los siglos XVII y XVIII.
La capilla de la Virgen del Rosario se sitúa en el lado de la Epístola junto al presbiterio y se abre en arco de medio punto ricamente ornamentado al estilo barroco con relieves tallados en estuco endurecido de color gris a modo de monumental portada. El acceso se encuentra flanqueado por pilastras decoradas en altorrelieve con motivos vegetales y finalizadas en capiteles compuestos. En las enjutas del arco se sitúa una pareja de ángeles. Sobre las pilastras se dispone un entablamento clásico con arquitrabe, friso con decoración vegetal y cornisa moldurada. En el segundo cuerpo se abre una gran hornacina que contiene la escultura de la Virgen con niño sobre un pedestal de cabezas de ángeles y la imagen de un santo a su derecha. En la cornisa, a ambos lados de la hornacina, se sitúan dos esculturas de ángeles músicos. En un marco oval se lee la invocación mariana “Ave María”. Todo el conjunto está rodeado por decoración vegetal de rocallas barrocas. La capilla está cubierta con cúpula de linterna dividida en seis paños recubiertos de decoración en relieve y pintura imitando brocados en gris sobre. En las pechinas y en altorrelieve hay unas figuras de cuerpo entero que representan a los cuatro Padres de la Iglesia, dos de ellas han perdido la cabeza.
La siguiente capilla, en el tramo central en el lado de la Epístola, es la de San Antonio de Padua. Tiene la embocadura con decoración pictórica y en la parte superior se encuentra una hornacina con concha avenerada en la que aparece pintada la imagen de san Antonio arrodillado recibiendo los estigmas del Niño Jesús. A ambos lados de la hornacina hay dos angelitos arrodillados, uno con un ramo de lirios y el otro con un libro abierto con inscripción ilegible. Bajo la hornacina y sobre el arco, el escudo de la orden franciscano. Tiene una cúpula con lunetos y tres ventanas abiertas sin linterna pintada con ornamentación barroca. En las pechinas pueden contemplarse representaciones pintadas en círculos enmarcados con rocallas de cuatro santos franciscanos, de los que sólo se conservan dos; los otros dos se hallan deteriorados, así como parte de la decoración, por filtraciones de agua.
La capilla de la Virgen del Pilar se sitúa en el tramo más próximo a los pies en el lado de la Epístola. Tiene el acceso pintado con decoración barroca de rocallas y al interior una cúpula de lunetos sin linterna con ventanas cuadradas en su base y decorada con nervios en relieve. En las pechinas tuvo decoración pintada que se halla muy deteriorada.
En el lado del Evangelio, la primera capilla desde los pies de la iglesia es la de San José cubierta con cúpula y linterna sin decoración, y la segunda la del Santo Cristo que tiene una cúpula formada por cuatro bovedillas semiesquifadas con pinjante central muy desarrollado, labrado en yeso en forma de tronco con nudos y, en su frente, un rostro monstruoso sonriente. En los ángulos sobre la cornisa, cuatro angelotes muy toscos en altorrelieve de yeso, sentados sobre hojas, cada uno de los cuales sostiene un atributo de la crucifixión.
La capilla del Sagrado Corazón de Jesús, la más próxima al presbiterio en el lado del Evangelio, tiene un acceso en arco de medio punto ornamentado con pilastras con capiteles de hojas nervadas, entablamento clásico con arquitrabe, friso y cornisa que termina con frontón partido y escudo policromado en madera perteneciente a la familia de los Claver. Partido en dos cuarteles, en diestra el escudo presenta torre sobre flor de lis y pasante sobre fondo verde; en siniestra, aves afrontadas sobre castillo; asimismo, yelmo de hidalguía con lambrequines de cueros y vegetales estilizados. La capilla se cubre con cúpula con linterna, decorada con motivos de peltas entrelazadas en relieve.
Junto al ábside, en el lado de la Epístola, se abre la sacristía, cuya puerta de acceso está decorada con diversos motivos en relieve. La cubierta es del siglo XVI y consta de una bóveda de crucería estrellada sobre ménsulas de ángulo talladas con cabecitas.
El coro se sitúa en alto a los pies del templo sobre arco rebajado.
La torre campanario se dispone junto a la fachada, en el lado de la Epístola, adosada a los pies del templo. La torre posee tres cuerpos de diferente cronología. El inferior, de piedra sillar y planta cuadrada, es coetáneo de la edificación primitiva románica del XII hasta el nivel de la primera imposta sobre la que se ubica el reloj y cuenta con dos vanos abiertos al frente. El segundo sirve de campanario y data del XVI y tiene los ventanales de medio punto dovelados, alargados y con imposta entre el medio punto y las jambas. El tercero es un chapitel de planta octogonal con superposición de dos órdenes de columnas con capiteles sosteniendo mascarones en cada uno de los ocho ángulos. Hay cuatro garitones cubiertos con media naranja de sillería rematados por una cruz.