Es una iglesia de planta rectangular, con cabecera semicircular orientada al este. Tiene una torre en el lado norte y un pórtico en el sur; asimismo, en este muro había una estancia sin comunicación con el interior de la iglesia (con acceso desde el pórtico) y una sacristía, que fueron eliminadas durante su restauración.
Está realizada en sillería, con algunos fragmentos de tapial en la parte alta de los muros norte y sur. Se cubre con teja, a dos aguas, con alero de dos hiladas escalonadas de ladrillo dispuesto en esquinilla.
El edificio presenta un aspecto relativamente peculiar por haber sido considerablemente recrecido en época moderna. Tanto sobre la nave como sobre el ábside se elevó un nuevo cuerpo, separado de la obra original románica por una línea de imposta.
En el ábside, que no presenta ninguna decoración, se abren tres estrechas ventanas aspilleradas en arco de medio punto. En la parte superior de los restantes muros, correspondiente a la obra recrecida, se abren varias ventanas en arco rebajado de ladrillos dispuestos a sardinel.
El elemento más interesante del exterior es la portada, que se abre en el segundo tramo del muro meridional, protegida por un pórtico cuadrangular totalmente abierto por su frente. Es un vano en arco de medio punto, enmarcado por doble arquivolta en baquetón y guardapolvo exterior con taqueado jaqués y sogueado en la parte central. Las arquivoltas apean en salmeres con rosetas que a su vez se apoyan en columnas circulares rematadas por capiteles con palmetas y otros motivos vegetales. En el muro situado sobre la puerta, descentrada respecto al vano, hay inserta una placa de piedra, procedente de otro lugar, con una cruz griega inscrita en un círculo.
El interior consta de una única nave, dividida en tres tramos por una bóveda de cañón con lunetos, con tres fajones que apean en ménsulas voladas. La cabecera se cubre con una bóveda de horno con nervaduras y lunetos. Ambas bóvedas arrancan de un entablamento continuo compuesto por varios finos listeles escalonados.
A los pies se eleva un coro alto, con el frente en arco escarzano y sotocoro en bóveda rebajada con lunetos.
La torre solo conserva completo uno de sus lienzos originales y parte de otro, ya que fue muy dañada durante la Guerra Civil. El lienzo original presenta en su piso superior un interesante doble vano en arco de medio punto para campanas.