Descripción
Se sitúa en un pequeño desnivel yermo dentro de una gran parcela de cultivo de cereal. A sus alrededores hay ligeras elevaciones no cultivadas con carrascas. Es una ladera de suave pendiente expuesta al sureste.
Banquera de tamaño mediano cuya capacidad total sería de unos 40 vasos. Tiene forma de caseta muy alargada con tejado a una sola vertiente y frente abierto con tres pilares.
Las paredes son de mampostería de entre 40 y 50 cm de grosor y están formadas por una doble cara de piezas de caliza con algún añadido de ladrillos. En la parte interior asoma una bancada formada por el material arcilloso original de la ladera excavado bajo el muro. Los pilares son de ladrillo macizo de origen industrial.
La cubierta es a un agua, con 16º de vertiente, y vierte hacia el frente del abejar. Se compone de rollizos a modo de cabios que apoyan su extremo superior en el muro trasero y su extremo inferior en los maderos que permiten dejar el frente diáfano. Sobre los cabios hay cañizos, tierra y teja árabe. Sobre la línea superior del tejado hay grandes piedras para evitar desperfectos causados por el viento.
La entrada se sitúa en el lado noreste en la parte central de uno de los muros cortos, tiene 70 cm de anchura, 1,1 m de altura, jambas de ladrillo y remate superior en dintel de maderos. Presenta algunos ventanucos a modo de huecos en la pared trasera.
El conjunto abre a 150º sureste y a favor de la pendiente.
Fuente
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RIVAS, Félix. Apicultura tradicional en el Somontano de Barbastro. Inventario inédito, Gobierno de Aragón, 2008.
Síntesis histórica
A juzgar por la presencia de ladrillos macizos de origen industrial, este abejar debió de ser construido o, al menos, reformado hacia mediados del siglo XX. De igual manera debió de continuar en uso hasta algún momento impreciso del tercer cuarto del siglo XX.