La casa consistorial se encuentra situada en la zona intermedia de la ladera en la que se dispone la villa, en un pequeño ensanchamiento de la vía, a modo de plaza estrecha y alargada, donde se ha configurado un interesante espacio urbanístico, no solo por la calidad de las fachadas que la configuran (a la del propio ayuntamiento, debe añadirse la prolongación lateral adosada a este sobre un pasadizo y la casa con lonja abierta de carácter popular situada frente a la fachada consistorial), sino por su ubicación en un interesante eje de comunicaciones: en ella desembocan la calle de San Roque y la calle Mesón, como eje norte sur, y de allí parten sendas escaleras hacia la parte superior de la villa (desde el interior del pasadizo) y hacia la iglesia, en este caso más monumental.
Tiene adosada en su fachada norte, por medianera, una vivienda. Y, en el ángulo sureste, dispuesta en L con la fachada del propio ayuntamiento, la interesante construcción mencionada cerrando la plaza sobre un pasadizo: conocida popularmente como “casa del secretario” y actualmente restaurada como espacio expositivo municipal, se encuentra parcialmente integrada en el edificio consistorial. Por un lado, una prolongación de la lonja comunica, a través de un tramo cubierto y un arco de medio punto, con el pasadizo bajo la vivienda; por otro, hay comunicación interior desde la planta principal del ayuntamiento con este edificio, aunque, dadas las transformaciones sufridas por ambos espacios, desconocemos si se trata de una característica original o fruto de una reforma posterior. El edificio se eleva sobre un pasadizo adintelado con vigas de madera y revoltón, abierto mediante arco apuntado a la plaza y de medio punto a la calle Mesón. Uno de sus elementos más significativos, pues lo vincula todavía más con el ayuntamiento, es una ventana abierta en su fachada principal: adintelada, con jambas y dintel decorados por baquetón y rematado por moldura conopial, es casi idéntica en sus detalles (las molduras del arranque de las jambas, la intersección superior de los baquetones verticales y horizontal) a una de las ventanas de la planta principal del ayuntamiento.
El ayuntamiento propiamente dicho es un edificio de planta rectangular ligeramente irregular. Como la mayor parte de las construcciones de esta localidad situadas en las vías que discurren paralelas a las curvas de nivel, al estar construido en un terreno en talud, tiene una fachada principal de tres pisos, mientras que la trasera solo presenta un piso (el superior) a la calle situada más arriba. Está construido en sillería vista en la fachada principal, mientras que en las restantes predomina la mampostería, que se presenta enlucida en la fachada posterior.
Fruto de dos fases de construcción casi inmediatas en el tiempo, el edificio recién construido fue ampliado por su parte trasera, en una obra de menor calidad. De ese modo, resulta más interesante y destacada la parte correspondiente a la construcción original.
La fachada principal, que adquiere una gran monumentalidad en virtud de lo exiguo del espacio urbano en el que se ubica, es sin embargo bastante sencilla, y ofrece cierto parentesco con otras fachadas cercanas que carecen de la suntuosidad propia de la arquitectura concejil de esta época en la zona, como la de Belmonte.
Es una fachada muy plana y austera, de composición muy regular en cuanto a los vanos, y únicamente animada por las aberturas de la lonja y por la gruesa imposta moldurada que separa la planta principal de la segunda. El elemento más destacado del exterior es, sin duda, la lonja. De gran profundidad, está estructurada en dos crujías paralelas, separadas entre sí por una arquería. Hacia la calle se abre en tres grandes arcos de medio punto, que apean sobre gruesas columnas dóricas, mientras que la arquería interior de separación entre las dos crujías consta únicamente de dos arcos escarzanos sobre el mismo tipo de soportes; en el extremo izquierdo de la lonja, sendos arcos escarzanos transversales (uno en cada crujía) la separan de un espacio cubierto que parece, por el aparejo, un añadido posterior y comunica con el pasadizo de la construcción adosada ya descrita. El interior de la lonja se cubre con forjado de vigas y revoltón. En su frente se abre una puerta en arco de medio punto de acceso al interior del ayuntamiento, junto a la que hay otra puerta más pequeña que comunica con el interior de la prisión. La puerta de ingreso a las dependencias municipales es en arco de medio punto, con las dovelas recortadas al extradós en cola de milano para engatillarlas con los sillares del paramento.
En cuanto al resto de la fachada, de gran sobriedad y regularidad compositiva, presenta dos ventanas por planta, en eje con las enjutas de los arcos de la lonja. Todas ellas son adinteladas con alféizar moldurado, salvo una, la ventana derecha de la planta principal, de mayor interés y muy similar a la ya descrita en la fachada de la denominada “casa del secretario”: adintelada y rematada por un piquillo conopial, tiene dintel y jambas recorridos por un grueso baquetón, que en la parte inferior de las jambas se encuentra resaltado por tres listeles horizontales (parece la única ventana original de esta planta, mientras que la izquierda podría corresponder a la reforma de la planta noble del ayuntamiento efectuada en el siglo XVIII). Ambos pisos están separados por una gruesa imposta moldurada, y remata la fachada una voluminosa cornisa escalonada de ladrillos aplantillados que le otorgan un dinámico perfil mixtilíneo.
Por último, en la fachada debe destacarse el escudo de la villa en una de las enjutas de la lonja: en un marco oval decorado con cueros recortados, aparece un paisaje montañoso y, sobre él, una campana rematada por una cruz calatrava, orden militar que detentaba el señorío de la villa en el momento de la construcción del ayuntamiento.
La visita del interior del ayuntamiento fue excesivamente rápida a causa de cuestiones organizativas, por lo que no fue posible tomar datos ni fotografías. A continuación se resume la descripción ofrecida por Concha Lomba en su estudio sobre las casas consistoriales del siglo XVI.
En la planta baja se abre un pequeño patio, destinado únicamente a albergar las escaleras.
En la principal, destaca el salón de sesiones, que ocupa toda la superficie de la lonja del piso inferior. Como elementos reseñables deben mencionarse las columnas de refuerzo, que prolongan las de la lonja, y la cubierta arquitrabada con vigas de madera.
En la planta superior, muy reformada, se ubican actualmente el consultorio médico y la biblioteca, con acceso independiente desde la calle situada a una cota superior, a través de la fachada trasera.