El enclave se localiza en el extremo meridional de una amplia loma constituida por conglomerados y lutitas del Mioceno-Plioceno, que se prolonga sin solución de continuidad hacia el Norte. Por el Este y el Oeste se encuentra delimitada por sendas vales, con rellenos aluviales-coluviales del cuaternario, que se juntan al Sur. Todo este espacio se encuentra sometido a importantes procesos de arroyada difusa, salvo el fondo de los vales, en los que predomina la sedimentación. La cubierta vegetal es escasa, dominando el matorral. En la parte meridional del conjunto se encuentra la Fuente del Enebro.
Uso del suelo: La mayor parte del espacio se encuentra cultivado, salvo los márgenes y el entorno de la masía, que se utiliza como pasto. Fuente.

La masía se asienta sobre la parte más alta de la loma, al lado del actual camino de acceso. Los materiales iberorromanos se detectaron en la parte media de la ladera meridional, entre la masía y la fuente, sin que se pueda descartar un desplazamiento de los mismos desde el sector ocupado por la masía. La fuente se sitúa en el extremo meridional, ya dentro del fondo de la val.

No se detecta la presencia de restos de estructuras que puedan asociarse a la fase iberorromana. Las únicas estructuras localizadas en el enclave se asocian a la fuente y a la masía.

Esta última está formada por un bloque compacto de edificios que incluye la vivienda, corrales, pajar, era y unos amplios patios cercados o corralizas.


Restos muebles asociados
Cerámica a torno de técnica ibérica, destacando la presencia de bordes cefálicos. Cerámica común a torno, de posible filiación romana. Presencia de materiales de Edad Moderna y Contemporánea asociados a la masía.