Descripción
En la actualidad, del primitivo recinto defensivo se conservan restos del castillo junto a la iglesia y cementerio, restos de las antiguas viviendas en la ladera del monte, y parte del recinto amurallado del conjunto desde la base del cerro hasta la rasante superior.
Del castillo quedan en pie los restos de una robusta pared construida en tapial y piedra. En un paramento de ladrillo y sillares de piedra caliza que se encuentra algo más adelantado se abre la gran puerta de acceso en arco de medio punto, de ladrillo. En la cara posterior de este paramento quedan adheridos restos de los paramentos de los muros interiores, que fueron muy robustos. Quedan además importantes restos de la muralla que protegía el recinto fortificado, y unos sesenta metros de la muralla baja que cercaba la población, de gran anchura con algunas saeteras, un camino de ronda y restos de una de las puertas de entrada al recinto.
La ermita del Castellar y el cementerio estaban a poniente; la iglesia se derrumbó por acción de las aguas del Ebro, volviendo a construirse frente a la desembocadura del Jalón a mediados del siglo XIX para albergar la imagen de la Virgen de el Castellar.
Protección. Historial administrativo
Declaración
Resolución: 17/04/2006
Publicación: 22/05/2006
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Fuente
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VAM COMUNICACIONES Inventario de patrimonio de la comarca de la Ribera Alta del Ebro. Inventario inédito, Comarca Ribera Alta del Ebro, 2003-2004.
Bibliografía
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ESTABLÉS ELDUQUE, José María. El castillo de Pola (Zaragoza). Castillos de Aragón. Noviembre 2018 , nº 36, p. 30-32.
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GUITART APARICIO, Cristóbal. Castillos de Aragón. Zaragoza: Librería General, 1977.
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PÉREZ VIÑUALES, Pilar. La convivencia de las tres culturas:cristianos,mudéjares y judíos. En HERMOSO CUESTA, Miguel; VÁZQUEZ ASTORGA, Mónica. (coord.). Comarca de Ribera Alta del Ebro. Diputación General de Aragón, 2005.p. 85-103.
Síntesis histórica
Los orígenes de la fortificación se remontan a 1091, cuando Sancho Ramírez establece esta posición fortificada, de gran importancia estratégica por su cercanía a Zaragoza. Esta ocupa la parte alta de las elevaciones frente a la margen septentrional del Ebro frente a su confluencia con el río Jalón.
Su gobierno fue cedido a distintos tenentes.
Fue prisión de la reina Urraca de Castilla, esposa de Alfonso I el Batallador, años antes de la conquista de Zaragoza.
Más tarde, en 1258 Jaime I lo concedió a García Pérez de Figueroles, empezando así su paso por numerosos señoríos privados, como los de los Luna, los Díez de Aux y finalmente los Cerdán en el siglo XV.
En esta centuria parte de la población de Zaragoza estaba en contra de esta poderosa familia por lo que el castillo fue atacado y destruido, conllevando esto el definitivo abandono de la población.
Datación e historia del bien
CONSTRUCCIÓN
Edad Media-S. XII