Consta de dos edificios, uno anexado al otro, de planta sencilla en ambos casos. La estructura exterior es de T, siendo uno de los edificios el matadero propiamente dicho y el otro la entrada al mismo. Está construido en hormigón posiblemente armado y tiene en el exterior una decoración de ladrillos, muy típica de muchos edificios en Aragón. El edificio que sirve de matadero tiene dos ventanas en todas sus fachadas, menos en la que queda anexada que hay tres ventanas. Todas ellas aparecen cerradas por una serie de persianas de lamas, fijas, adosadas a la pared. Este edificio tiene a su vez una puerta más grande en la fachada que da al edificio anexo. El edificio de entrada es alargado, tiene una puerta de acceso al personal, otra de acceso a los animales y cinco ventanas, cuatro de pequeño tamaño y una el doble de grande que estas otras. Tiene un tejado que se sujeta por una pequeña columna y crea un espacio cubierto.

Según la documentación encontrada sabemos que el interior se dividía en tres espacios: uno para el estabulación del ganado, otra para la matanza y la primera elaboración de la carne y la última era de administración (los despachos). Las estancias de la matanza se divide en cuatro estancias; matanza, escaldado, manipulación y mondonguería y la sala de oreo.