La iglesia se emplaza en la parte alta de la población y se encuentra asentada en un espolón de arenisca sobre el río Algars. El caserío se dispone en la ladera sur de este promontorio.
Se trata de una construcción en sillería sobre planta rectangular orientada al este, de cuyo volumen principal sobresalen en el lado norte cuatro cuerpos de distintas alturas y longitudes, correspondientes a cuatro capillas laterales; en el lado este, el cuerpo cuadrangular de las sacristías; y en el sur, una pequeña torre de planta octogonal además de un cuerpo de campanas con espadaña, que se eleva sobre la portada de acceso en el mismo muro. Adosada perpendicularmente al lado sur se encuentra la casa parroquial.
En los paramentos exteriores del cuerpo de la iglesia se observa un cambio de aparejo en las cinco hiladas superiores, a partir de una línea coincidente con el emplazamiento de tres mensulones escalonados en la esquina noroeste, y otros dos, incompletos, en la fachada meridional.
Se cubre el cuerpo principal con teja árabe a dos vertientes, prolongándose la tendida norte sobre las capillas laterales centrales, y la sur, sobre la torre poligonal. También con teja árabe a dos aguas se cierran las otras dos capillas laterales y el cuerpo de campanas, mientras que las sacristías lo hacen con cubierta de losas a una pendiente.
La ventana situada en el hastial de los pies y la portada constituyen los elementos más destacables al exterior.
La ventana, en arco apuntado, alberga un importante trabajo decorativo: cuatro columnillas de fuste octogonal dividen el espacio inferior en tres luces, cada una de ellas cerrada por un arquillo trilobulado. Sobre ellos hay una labor de tracería en la que se combinan motivos trilobulados y tetralobulados enmarcados en triángulos y círculos, respectivamente. Un arco, también apuntado, moldurado y en saledizo, sostenido por dos mensulillas antropomorfas, lo protege a modo de guardapolvo.
El ingreso se realiza por el lado sur bajo portada en arco apuntado de amplio derrame, a base de arquivoltas y de jambas molduradas sin decoración escultórica.
Al interior presenta nave única dividida en tres tramos, más el del altar. Tiene coro alto a los pies.
A esta nave se abren cuatro capillas en el lado del Evangelio, que se cubren, respectivamente: con bóveda de cañón, la del tramo de la cabecera; con cúpula sobre pechinas, la del segundo tramo; con cúpula vaída, la del tercero, y, con medio cañón la de los pies. En el lado de la Epístola solo hay dos aperturas en el interior del muro, a modo de capillas-nicho, una en el tramo de la cabecera y, otra, en el siguiente, cerradas por cortos tramos de cañón.
La nave se cubre con bóveda de cañón apuntada sostenida por tres arcos fajones, también apuntados, que arrancan, sobre capiteles lisos, desde una línea de imposta recta, en algunos tramos, y con molduras de bocel y listel, en otros. El arco presbiterial es el único que apoya sobre pilastras adosadas poligonales.
La cabecera se cierra con bóveda de crucería con nervaduras que apoyan sobre delgadas columnas. En la clave hay un tondo con dos peces en relieve.
Dos puertas en arco conopial dan paso desde la cabecera a sendas sacristías intercomunicadas entre sí por puerta adintelada. Están cerradas por bóvedas de crucería sobre ménsulas que, al igual que en el altar, tienen en la clave un tondo con peces. Cada una de ellas se abre hacia el río mediante una ventana de asiento o “festejador”.
El coro monta sobre forjado de vigas de madera con frente en arco escarzano de sillería. Para la realización del revoltón de yeso entre las vigas se empleó un molde tallado con relieves (luego reutilizado en el arco de la calle Carnicería de Cretas) a base de motivos vegetales y animales tomados del entorno o de cultivos coetáneos (vid, olivo, encinas, algunos frutales…). El pretil está realizado a base de grandes losas de piedra horadadas con motivos geométricos. Se realiza el acceso bajo el coro por puerta en el lado de la Epístola, que da entrada a una escalera de caracol, alojada en el interior de la torre de la fachada meridional. Esta misma escalera daba salida al tejado original, pero actualmente conduce a un espacio bajo cubierta desde el que se puede acceder al cuerpo de campanas.
Construida bajo un modelo prácticamente idéntico a la iglesia de Santiago apóstol de Lledó y a la ermita de la Consolación de la Virgen de Cretas.
Perteneció al obispado de Tortosa: filiación con construcciones emplazadas en Tarragona (Laliena, 2016: 327-328)