"Pues chico, de brujas siempre decían que había brujas, si. Le llamábamos la bruja, la bruja. Bajábamos y teníamos miedo en Casa Albeita, que estaba cerrada, medio caída ya. Íbamos a abrevar os machos, por la noche, pobres de nosotras… con Julia. Llegaba mi padre cansau: "!Ala… –de labrar– Ahora han comido os machos (…) antes d'acostaros, abrevar os machos y que coman toda la noche! –pa marchar al otro el día–" Ya sabes ande estaba la fuente…y pasábamos por la puerta Albeita y decía: "!Hoy, que sale la bruja!". Llaman: "!Miá que  sal'Andresa –la llamaban… alguna mujer que habría habido Andresa– Mira que tos saldrá Andresa de Casa Albeita y os cogerá!"

• SATUÉ OLIVÁN, Enrique. Archivo Enrique Satué Oliván. Testimonios de aquel Pirineo. Archivo sonoro, 2000-2007.
• SATUÉ OLIVÁN, Enrique. Siente. Testimonios de aquel Pirineo. Zaragoza: Prames, 2016.