"Bueno, pues ha acabau el verano, eh, qu´el verano yera con mucho trabajo, y ha veniu l´agüerro. L´agüerro, pues nada, a l´último feben hoja, t´a es conejos, t´a desfé en el invierno en el pallé la hoja, y ya mentras dura la hoja que se pué fe ya se meteban royos, las cereseras d´un coló, el chopo de otro, el caixigo d´otro, el freixen ya se le cae la hoja –ixe, el freixe no cambia de coló, se mantiene verde y se le cae la hoja; ixe no, pero el cereso, el chopo, el tremol y ixo, todo cambia– entonces caye l´agüerro y ya paece que te cae la tristeza y la naturaleza fa un cambio. Siempre decin que: “!Ay, ya ha veniu l´agüerro, ay, que cambio te fa la naturaleza!” O sea que igual que l´agüerro cayeba, paeceba que las personas tamién un poco ya decaitas, eh. Ya veniba l´agüerro, ya eben reogiu las cosas, caleba… pues… las casas…, las judías mismo ya las febas esbachocalas, que las esbachocaben de noches, eh, preparabas las cosas ta troballá n´invierno…, y oye, yera triste l´agüerro, que le llamaben triste, y ya caebas en el invierno, y fe fuego, quemau es tizons en las cocinas…; que prático yera…, resulta qu´ahora se meten es hogares. ¡Pero si no ye tan prático…, si el verdadero hogar yera el de antes, en todas las casas i-eba hogar, echabas un fajo ramilla, y allí, cuando venías del monte bien mojau, te secabas rápidamente; tó vaporiaba y tó seco, con las cadieras, el fuego, y la armonía, feliz y contentos!"

• SATUÉ OLIVÁN, Enrique. Archivo Enrique Satué Oliván. Testimonios de aquel Pirineo. Archivo sonoro, 2000-2007.
• SATUÉ OLIVÁN, Enrique. Siente. Testimonios de aquel Pirineo. Zaragoza: Prames, 2016.