Descripción
A sus pies se abre un espacio a modo de plaza. Es un edificio exento.
Es un edificio de tres naves, la central de mayor altura y culminada por cabecera poligonal, con una torre cuadrangular adosada a los pies del edificio por el lado norte.
El acceso se sitúa en el tramo central del costado sur, precedido por un pórtico cubierto por bóveda de crucería (rehecha tras la Guerra Civil). La portada, de orden jónico, es en arco de medio punto flanqueada por pilastras adosadas que sostienen un frontón triangular.
En el interior las naves se encuentran separadas por pilares cilíndricos con estrechas pilastras adosadas a sus frentes, que a su vez determinan los cinco tramos en que se divide el cuerpo de naves. Todos los espacios se cubren con bóvedas de crucería, que fueron reconstruidas tras la Guerra Civil eliminándose los nervios combados originales. En las naves laterales los nervios de las bóvedas apean sobre ménsulas que a su vez apoyan directamente sobre los pilares; en la central, debido a su mayor altura, las ménsulas se disponen sobre un entablamento corrido situado a cierta distancia sobre los pilares.
El coro alto que actualmente existe a los pies sustituyó tras la Guerra Civil al coro bajo ubicado en la nave central.
Asimismo, en el interior destaca también la portada de la sacristía, situada en el costado norte de la cabecera. De carácter clasicista, en ella unas pilastras acanaladas y un frontón triangular enmarcan el hueco del vano adintelado.
El modelo de iglesia de tres naves fue utilizado habitualmente en el siglo XVI para los templos con categoría de colegial, pues su amplitud permitía instalar un coro bajo en la nave central para albergar la comunidad de canónigos.
En los primeros estudios realizados sobre este edificio, José Luis Pano la adscribió a la tipología de iglesias de salón del siglo XVI, subrayando sus similitudes con ejemplos contemporáneos como Panticosa y Yebra de Basa. Posteriormente matizó dicha adscripción. Con una mayor altura de la nave central, la parroquial de Bielsa se asemeja más a modelos de una única nave con profundas capillas laterales, como la iglesia de Boltaña.
Estilísticamente también puede relacionarse con otros ejemplos aragoneses de comienzos del siglo XVII (por ejemplo, la iglesia de Alcalá de la Selva), de tres naves, en los que conviven las últimas pervivencias gotizantes en los abovedamientos con soportes modernos, poco antes de que se comiencen a extender soluciones características del barroco.
Fuente
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PUYOL IBORT, Marta et al. Inventario de patrimonio arquitectónico de Sobrarbe y Ribagorza. Inventario inédito, CEDESOR (Centro de Desarrollo de Sobrarbe y Ribagorza), 1999-2001.
Síntesis histórica
La construcción de la iglesia de Bielsa fue un proceso laborioso que se prolongó durante 30 años, desde 1601, en que el concejo de Bielsa convocara un concurso para elegir un proyecto, hasta 1633, fecha en la que se da por finalizado el campanario, último elemento de la iglesia en ser construido.
Se realizó en dos fases. La primera de ellas fue dirigida por el maestro Antón Torón hasta su muerte en 1619, elevando los muros, parte del campanario y planificando la construcción de las bóvedas. La segunda, de 1625 a 1633, está dirigida por Juan Valén, que construyó las bóvedas y el pórtico, y finalizó la obra de la torre.
Los bombardeos sufridos por la localidad durante la Guerra Civil motivaron la reconstrucción total de sus bóvedas, emprendida por la Dirección General de Regiones Devastadas en la década de 1940.
Datación e historia del bien
PROYECTO DE CONSTRUCCIÓN
Edad Moderna-S. XVII-1601
En esa fecha el concejo de Bielsa convoca un concurso para la realización de las trazas de la iglesia, en el que participan Martín de Torón, que había intervenido en la finalización de la iglesia de Olsón, y Pedro Lapuente, que en ese momento se encontraba trabajando en Aínsa.
de Torón, Martín (Proyectista)
Lapuente, Domingo (Proyectista)
CONSTRUCCIÓN
Desde Edad Moderna-S. XVII-1603
hasta Edad Moderna-S. XVII-1619
RENACIMIENTO
En 1603 se inicia el primero de los dos períodos de construcción del edificio, dirigido por Martín de Torón hasta su muerte.
Según la documentación conservada, se sabe que en 1610 los muros estaban levantados y la torre iniciada. En 1611 Torón contrata con el albañil oscense Pedro Martínez de León la ejecución de las bóvedas, según traza del propio Torón. Entre las obligaciones de aquel se encontraba también realizar algunos ornamentos en yeso con moldes realizados por Torón (entablamento y diversas molduras) y un púlpito.
Martínez de León, Pedro (Albañil)
de Torón, Martín (Maestro de obras)
CONSTRUCCIÓN
Desde Edad Moderna-S. XVII-1625
hasta Edad Moderna-S. XVII-1633
RENACIMIENTO
Tras la muerte de Antón Torón se produce una pausa en las obras, que se reinician al cabo de 5 años. Retoma las obras Juan Valén, que hasta entonces había actuado como fiador de Torón. El contrato indica que debía realizar las bóvedas, pórtico, portada y otros elementos menores del interior. Las obras se desarrollaron con lentitud, debido a retrasos en el suministro de materiales por parte del concejo, prolongándose hasta 1633, en que se dio por terminada la torre.
Valén, Juan (Cantero)
Puyola, Juan (Albañil)
Puyola, Miguel (Albañil)
de Ruesta, Pedro (Tasador)
Casales, Claudio (Tasador)
Mostolac, Juan (Tasador)
REPARACIÓN
Edad Moderna-S. XVII-1657
BARROCO
Zona afectada: Capilla del Santo Cristo
Lacoma, Juan (Albañil)
DAÑOS PARCIALES POR INTERVENCIÓN HUMANA
Desde Edad Contemporánea-S. XX-01/05/1938
hasta Edad Contemporánea-S. XX-20/06/1938
Los bombardeos que sufrió la población con motivo del asedio al que fue sometido el valle provocaron el derrumbe de la mayor parte de las cubiertas del edificio.
Zona afectada: Cubiertas
RECONSTRUCCIÓN
Edad Contemporánea-S. XX-1940
La Dirección General de Regiones Devastadas llevó a cabo la reconstrucción de las cubiertas interiores y exteriores de la iglesia. Se realizaron según el modelo de bóveda de crucería estrellada original, auqnue simplificándolas al eliminarse del diseño los primitivos nervios combados.
Zona afectada: Cubiertas
Tradiciones
- Hasta hace unas décadas existía en el campanario de la iglesia de Bielsa una campana de pequeño tamaño, con la efigie de santa Bárbara grabada en relieve, que se hacía sonar con un volteo especial cuando una tormenta se acercaba al pueblo.