Se trata de una iglesia construida en la primera mitad del s.XV sobre el solar de otra anterior románica, dentro del recinto amurallado situado en la parte más alta de la población, donde también se ubicaba el castillo. Consta de nave única de tres tramos con capillas laterales entre los contrafuertes (dos en el lado del Evangelio, comunicadas entre sí, y una en el de la Epístola) y testero recto. Los dos primeros tramos se cubren con bóveda de crucería sencilla, mientras que el correspondiente a los pies se cubre con bóveda de cañón apuntado y aloja un coro alto. Tanto el muro septentrional como el meridional cuentan con tres potentes contrafuertes. Entre los dos últimos del muro meridional se abre la portada principal por medio de tres arquivoltas de medio punto baquetonadas y prolongadas en jambas. En el ángulo nororiental se alza la torre de planta cuadrada y dos cuerpos diferenciados en altura, a la que se accede desde la sacristía. En el cuerpo superior presenta en cada uno de sus frentes una pareja de vanos abiertos en arco apuntado. Todo el conjunto está construido en sillar de buena factura y se encuentra rematado por almenas y merlones, que le confieren una gran unidad y le dan un aspecto compacto y macizo de fortaleza.
Su estado de conservación es bueno en general.