Alcance y contenido
Sus primeros trabajos fotográficos, realizados entre 1912 y 1920, son placas y fotografias estereoscópicas; luego comienza a trabajar con placas de mayor formato (13x18), que él mismo se encarga de retocar. De la época en que estuvo destinado en el Norte de África (1915-1926) datan sus reportajes sobre Marruecos, tratados con un estilo pictorialista muy característico de aquel tiempo. En su obra se observa un especial cuidado en la elección de las luces y, aunque practicó las técnicas del bromóleo y el fresón, procuró siempre que en los positivos no hubiera grandes contrastes tonales. Le gustaba fotografiar paisajes, en los que tiene como principal protagonista el Pirineo, y escenas rurales, en las que busca el tipismo de los pueblos y gentes de la provincia de Huesca. A pesar de su mirada idealizada de la naturaleza y el hombre, y los tratamientos pigmentarios en los positivados, sus fotografías conservan la temática del documento social, es decir, la búsqueda de la realidad con una mirada testimonial y descriptiva.